El asesinato del vocalista Kevin Amalio Hernández, su esposa y sus dos hijos destapa una posible venganza por parte del crimen organizado en torno al Centro Hípico Maturana
El asesinato de Kevin Amalio Hernández, vocalista del grupo H Norteña, su esposa y dos de sus hijos, ha desencadenado una serie de investigaciones que buscan esclarecer los motivos detrás de esta violenta acción en la que también resultaron heridas su suegra y un niño de cuatro años de edad.
El ataque, perpetrado mientras la familia viajaba por una carretera en Chihuahua el pasado domingo 5 de mayo, tras salir de una carrera de caballos en el Centro Hípico Maturana, ha sido vinculado por las autoridades estatales con figuras del crimen organizado, específicamente apuntando hacia el Cártel de Sinaloa.
Micaela y Marisa Sandoval y Kevin Amalio Hernández, vocalista de la agrupación H Norteña. (Fotos: El Minero Noticias / Instagram)
Las pesquisas han revelado datos relevantes sobre el vehículo utilizado por los presuntos homicidas, un Chevrolet modelo 2014 de color azul marino con reporte de robo, encontrado abandonado y que se convierte en una pieza clave para entender el ataque. En la escena, se recolectaron evidencias significativas como 150 casquillos de bala, evidencia de la brutalidad empleada contra la familia.
Un elemento que adiciona complejidad al caso es la conexión de esta masacre con el ‘levantón’ de José Domingo Carrera Bermúdez, conocido también como “El 010″, líder del Cártel de Sinaloa en Chihuahua, específicamente en Parral.
El Centro Hípico Maturana
(Facebook: Centro Hipico Maturana Parral)
En agosto de 2023 el “010″ fue “levantado” en el Centro Hípico Maturana. El levantamiento de “El 010″ se realizó con vehículos clonados de la Guardia Nacional, lo que indica la complejidad y el nivel de organización detrás del acto.
Cinco meses después de su desaparición, el cuerpo de José Domingo Carrera Bermúdez fue hallado cerca de la carretera Panamericana en Ciudad Juárez, acompañado de alrededor de 300 kilos de droga, incluyendo fentanilo y metanfetaminas. Este hallazgo fue confirmado por César Jáuregui Moreno, titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua, quien afirmó que el cuerpo encontrado coincidía con las características físicas, señalado como uno de los principales operadores del CDS.
El Centro Hípico Maturana, ubicado en el municipio de Hidalgo del Parral, Chihuahua, entra en esta historia por su conexión con Marisela Sandoval, esposa del vocalista de H Norteña y viuda de Ezequiel Ramírez Lugo.
Originalmente el centro fue propiedad de Ezequiel Ramírez Lugo, quien fue secuestrado y posteriormente asesinado en octubre de 2015. Ramírez Lugo, dedicado a la organización de carreras de caballos, encontró su trágico fin cuando, tras ser levantado por un grupo armado, fue encontrado sin vida con huellas de tortura y un impacto de bala en la cabeza en las inmediaciones de Maturana. Este violento episodio dejó el centro hípico en manos de su esposa, Marisela Sandoval, quien asumió la administración del negocio.
La gestión de Marisela al frente del Centro Hípico Maturana continuó hasta su propio fallecimiento, junto con Kevin Amalio y dos de sus hijos.
Este caso no solo reflejó la persistente ola de violencia en la región, sino también sugirió posibles vínculos y represalias dentro del entramado del crimen organizado, en el que el Centro Hípico podría haber jugado un papel, voluntario o involuntario, en las actividades de estos grupos.
La relación entre el asesinato de “El 010″ y la masacre de la familia de H Norteña se insinúa en la posibilidad de una conexión entre las actividades en el Centro Hípico Maturana y las disputas del crimen organizado en la región.
¿”Venganza” inconclusa?
Pese a la masacre de la familia, la supuesta “venganza” que estaría detrás del caso no ha parado ahí. Micaela, la suegra de Kevin Hernández y también madre de Marisela Sandoval, ha sido víctima de ataques posteriores al multihomicidio que acabó con la vida de su hija, yerno y nietos.
Tras el brutal ataque Micaela fue herida de bala, pero sobrevivió. Sin embargo, su seguridad y bienestar se vieron seriamente comprometidos cuando, en un desarrollo alarmante de los eventos, fue objeto de un intento de asesinato.
Micaela fue objeto de ataques dirigidos, inicialmente en el Hospital de Jesús, donde estaba siendo atendida junto a uno de los hijos de la pareja. Según reportes del secretario de Seguridad Pública Estatal de Chihuahua, Gilberto Loya Chávez, dos individuos encapuchados ingresaron al hospital con la intención de ubicar y asesinar a Micaela.
Sin embargo, no lograron encontrarla, ya que esta logró evadir el ataque. Los atacantes interrogaron a varias personas intentando obtener información sobre su paradero o estado de salud, pero finalmente se retiraron del hospital sin lograr su objetivo.
El peligro no cesó con este intento fallido en el hospital, ya que la casa de Micaela, situada en la colonia Santa Rosa, fue posteriormente atacada. La fachada de la casa y dos vehículos estacionados al frente fueron rafagueados con armas de fuego, lo que demuestra una continua y determinada agresión hacia la familia. Actualmente, se desconoce el paradero y el estado de salud de Micaela, tras estos ataques.
